La capacitación abordó materias de detección y manejo de situaciones de violencia dentro y fuera de la universidad.
El Curso “Formación de Monitoras y Monitores de Prevención en Violencia de Género”, llegó a su fin con una ceremonia que certificó a 40 estudiantes de distintas carreras de la UCT. La instancia fue ejecutada por el Programa para la Igualdad del Departamento de Igualdad de Género de la Municipalidad de Temuco y la Dirección de Género de la Universidad Católica de Temuco.
La ceremonia se desarrolló en el Campus San Francisco y reunió a profesionales de la casa de estudios, del municipio, familiares, amigos y amigas de los estudiantes que obtuvieron la certificación en formación en temáticas de género.
El curso “Formación de Monitoras y Monitores de Prevención en Violencia de Género” comenzó a gestarse e impartirse en 2021, con el fin de que el estudiantado adquiriera herramientas de prevención, detección y erradicación de situaciones de violencia de género y, a su vez, asumiera un rol activo frente a estas problemáticas tanto en su comunidad como en sus espacios fuera de la universidad.
Este año se desarrollaron dos versiones, los meses de mayo y septiembre, la primera en el Campus San Francisco y la segunda en el Campus Juan Pablo II, siendo esta la segunda experiencia en este campus, mostrando un aumento del interés en participar en este tipo de iniciativas.
La directora de la Dirección de Género, Olga Carrillo Mardones, entregó un saludo vía remota a los participantes de la ceremonia, donde expresó su reconocimiento a los nuevos monitores y monitoras y destacó el rol que ahora comienzan a asumir en la promoción de espacios seguros y respetuosos, gracias a las herramientas adquiridas durante el curso.
“Su participación, compromiso y motivación es clave para avanzar en la prevención, detección y evaluación de la violencia de género. Con su liderazgo contribuyen a transformar cada espacio de nuestra Universidad. Les invito a que sigan en este proceso y que motiven a sus compañeros y compañeras a inscribirse y participar también en este curso”, precisó.
A sus palabras se sumó Daniela Reyes Mardones, abogada del Departamento de Igualdad de la Dirección de Seguridad Pública de la Municipalidad de Temuco, quien los felicitó por haber culminado el proceso de formación de forma comprometida y los destacó como nuevos agentes de cambio para la comunidad y la ciudadanía.
Menciones y palabras especiales
Durante la ceremonia, se reconoció a un grupo de tres estudiantes Amelia Salvo Jara, Javiera Hoger Hoger y Catari Rozas Sanhuez, por el desarrollo de su actividad de réplica, una etapa clave del curso que busca que las y los participantes pongan en práctica los conocimientos adquiridos para promover la prevención de la violencia de género en sus propios entornos.
Como parte de su proyecto, el grupo desarrolló un chat generado con inteligencia artificial, dotado con protocolos y datos provenientes de fuentes confiables y verificadas, diseñado para orientar frente a situaciones de violencia de género. Esta herramienta, que actualmente se encuentra en marcha blanca, ofrece recursos de prevención y orientación y eventualmente estará disponible para compartir con la comunidad universitaria.
A modo de cierre de la ceremonia, el estudiante Cristóbal Villarroel Manquis, de la carrera de Psicología y participante del primer curso impartido en el campus San Francisco, entregó un mensaje en representación del grupo de estudiantes certificados de su campus, donde destacó la importancia de la formación recibida y el impacto que tuvo en su visión sobre la prevención de la violencia de género y la construcción de comunidades más seguras y solidarias.
“Esto fue un motor que me permitió acercarme a más perspectivas y crecer en un espacio de reflexión, donde además de aprender conceptos y herramientas se compartía la experiencia que da a entender una realidad desde otros lentes. Para mi formación como psicólogo, esta experiencia amplió totalmente mi compromiso social y con el aprendizaje, y creo que esta instancia puede ser valiosa para todas las disciplinas, porque nos ayuda a construir vínculos más amplios y comunidades con mayor solidaridad”, destacó Villarroel.
Por otro lado, la estudiante Harley Coloma Sandoval, de la carrera de Ingeniería Civil Geológica y participante del segundo curso impartido en el campus Juan Pablo II, entregó un mensaje en representación del grupo de estudiantes certificados de su campus, destacando el impacto que la formación en prevención de violencia de género tuvo en su visión profesional y personal, y cómo contribuye a construir entornos más justos e igualitarios en su disciplina.
“Me siento afortunada de haber adquirido estos aprendizajes y de enfrentar la injusticia y la desigualdad que muchas veces elegimos ignorar. En mi carrera, donde existe una brecha de género muy grande, comprendí que todos y todas tenemos un rol. No hay carreras de hombres ni de mujeres, sino vocaciones y talentos que merecen las mismas oportunidades. Esta formación no solo es valiosa para el desarrollo personal, sino también como herramienta para crecer profesionalmente”, señaló.